Los cuadros, esos objetos que son mucho más que simples elementos decorativos. Una buena elección y colocación de los cuadros en tu casa puede marcar la diferencia entre un espacio sin más y otro que emane personalidad. Por eso hoy vamos a contarte todo lo que necesitas saber para llevar colgar tus cuadros llevando las paredes a otro nivel.
Precioso salón abierto al jardín con espectacular cuadro sobre el sofá. Fuente Dwell
Nociones previas para colgar cuadros.
Una de las ventajas que tienen los cuadros a diferencia de otros objetos de decoración es que podemos emplearlos en cualquier estancia de casa. Desde el recibidor hasta el dormitorio pasando por el salón y el comedor, piensa que tu casa es un lienzo en blanco a la que podrás añadir un toque único.
Comencemos por el principio, ¿qué necesitas para colgar cuadros en casa? Unos materiales sencillos que si no tienes en casa podrás comprar fácilmente en cualquier ferretería o tienda de tu barrio. Toma nota: un martillo, metro, un lápiz, tacos y alcayatas y un taladro si vas a necesitar hacer agujeros.
Salón con cuadros y mobiliario colorido. Fuente EstLiving
No todos los cuadros valen para cualquier pared y viceversa. Es decir, antes de ponerte manos a la obra te recomendamos que tengas muy bien decidida la posición en la que los quieres colocar. Recuerda, las dimensiones serán la clave en este caso. Así un cuadro pequeño en una pared excesivamente grande se verá ridículo y un cuadro muy grande en una pared pequeña no lucirá lo que debería.
Igualmente, además de fijarte en el tamaño nuestra recomendación es que atiendas a los colores o la temática de los cuadros para decidir dónde colocarás cada uno de ellos. Incluso puede que te apetezca hacer una composición con varios, es una opción muy de moda pero que requiere ese trabajo previo de casar unos cuadros con otros.
Cocina moderna decorada con un gran cuadro. Fuente Estliving
Altura de los cuadros.
Una vez que sabes en qué pared quieres colocar cada cuadro y tienes las herramientas necesarias, toca decidir la altura perfecta para colgar los cuadros. La teoría plantea que éstos deben estar colocados a la altura de los ojos.
El dormitorio también es un buen lugar para colocar cuadros. Fuente Dwell
Es cierto, cada persona tenemos una altura, por eso se entiende que por norma general una altura de 170 o 175 cm es adecuada. Obviamente esto no podemos aplicarlo en todos los casos ya que por ejemplo podemos tener un mueble u otros elementos que deberemos tener en cuenta a la hora de colgar los cuadros. Para que un cuadro o una composición se vea equilibrada sobre cualquier mueble, debes situarlo de 15 a 30 cm sobre el mueble. Así, ambos elementos pueden respirar y se conjugan a la perfección.
¿Quieres un consejo? En caso de duda, bájalo. Si te pasas de alto seguramente no tendrá la iluminación suficiente.
Cocina comedor de estilo contemporáneo. Fuente Plataforma Arquitectura
Manos a la obra.
El siguiente paso es definir los dos puntos en los que habrá que taladrar la pared. Te aconsejamos que utilices el metro y midas la posición de ambos puntos desde el suelo y la distancia entre ellos, cuando lo tengas claro usa el lápiz para marcar la posición deseada.
Coloca un bonito cuadro sobre el sofá. Fuente Estliving
Este es el momento en el que tendrás que utilizar el taladro para hacer los agujeros donde irán las hembrillas o alcayatas. Es importante escoger la broca adecuada para cada tipo de pared, así como las medidas de ésta, el taco y la alcayata. Haz los agujeros, introduce los tacos con el martillo y después las alcayatas. Solo te quedará colocar el cuadro y comprobar que está recto para empezar a disfrutar de él.
En el caso de que no quieras o no puedas hacer agujeros para colgar tus cuadros, existen alternativas maravillosas. Toma nota: tiras adhesivas, clavos y ganchos adhesivos será tus nuevos mejores amigos. Si te has quedado con ganas de más, aquí te dejamos un artículo de la Revista El Mueble.
Salón comedor con lámpara Serg y un gran cuadro detrás. Fuente Plataforma Arquitectura
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