Magali Bastidas parece una barcelonesa más, cuando la ves llegar con su jersey de cuello redondo y unos vaqueros, su sonrisa te transmite un estilo silencioso que vive al margen de las modas. No pienso ocultar mi debilidad personal por Barcelona, cuna de artistas, filósofos y empresarios, es una ciudad que puedes exprimir y siempre tiene algo más de jugo que ofrecerte.
Hoy tomamos un café con Magali y hablamos de pasado, presente y futuro. Una mujer con chispa, muy pragmática y con las ideas muy claras de lo que es y a dónde quiere llegar pero sobre todo de qué forma llegará hasta allí.
Proyecto de Magali Bastidas en colaboración con Josep Ribes
El origen
P: Cuéntanos como fueron tus inicios en el mundo del diseño de interiores. Cómo fue tu trayectoria hasta llegar al estudio que hoy lleva tu nombre.
R: Desde bien temprano he admirado el trabajo de mi tío Sergio Bastidas como arquitecto. Siempre fui una gran observadora y jugaba a imaginar cómo sería mi casa. Por ello, encaminé mis estudios hacia esta profesión estudiando interiorismos en en Elisava Escuela Universitaria de Diseño en Barcelona.
Al terminar la carrera, empecé a profesionalizarme de la mano de Ikea, donde me entusiasmó su apuesta por la democratización del diseño, facilitando que este llegue a todos los hogares. Recuerdo esa época de aprendizaje como un muy buen punto de partida.
Tras una temporada de formación en Nueva York, volví a Barcelona y tuve la oportunidad de empezar a trabajar en el estudio de interiorismo de Adela Cabré. Junto a ella estuve 15 años, y realmente ha sido y será mi mayor escuela.
Desde hace más de dos años estoy disfrutando de una etapa de emprendeduría y puedo decir que disfruto mucho de cada proyecto y de cada reto como si fuera para mí. Siempre trato de implicarme en cada detalle por pequeño que sea para sacar su mejor versión y exprimir su potencial.
Hace apenas unos meses inauguré mi oficina muy cerca de casa, lo que me permite conciliar perfectamente la vida personal y profesional.
Todo esto lo compagino desde 2016 con la docencia en ESdesign Escuela Superior de Diseño de Barcelona, otra faceta que me llena mucho porque me acerca a las nuevas generaciones del diseño de interiores.
Proyecto de Magali Bastidas en colaboración con Josep Ribes
La esencia
P: Define la filosofía Magali Bastidas.
R: Mi filosofía se basa en esculpir al detalle un proyecto de interiorismo como si se tratara de una obra de arte o de un traje de sastrería realizado a medida. La implicación y la empatía en cada proyecto son, en mi opinión, la clave para el éxito. A la hora de conceptualizar un espacio, mi máxima siempre pasa por conseguir su optimización en beneficio de la convivencia y una armonía estética con el lenguaje propio del lugar, algo que para mí es esencial.
P: ¿Cuál es el estilo decorativo con el que te sientes más cómoda? ¿Porqué?
No me gusta encasillarme en un estilo, soy partidaria de atender a la esencia individual de cada persona. Esa labor es muy interesante porque te permite descubrir el alma del proyecto y muchas veces revela aspectos que la propia persona desconocía. Para mí, la esencia o el estilo es todo aquello que te hace crecer como ser, que te atrae de forma natural sin saber el porqué.
Algunos de los conceptos con los que me siento especialmente cómoda trabajando son la atemporalidad, la funcionalidad, la sobriedad, la artesanía…
Si tuviera que mencionar un estilo concreto podría decir que me siento muy identificada con uno que supere el paso del tiempo, conjuntado con materiales nobles como la piedra y la madera, y tonalidades neutras.
Soy interiorista pero dentro de la profesión me defino como una arquitecta del espacio, pues me gusta mucho trabajar el envolvente de la vivienda y hacerlo funcional principalmente. Para ello, la distribución es la clave porque consigues sacar provecho de cada rincón y así el espacio proporcionará calidad de vida para quien lo habite. Asimismo, siempre busco la armonía en los espacios y, de esa forma, destacar la belleza de la propia arquitectura.
Proyecto de Magali Bastidas en colaboración con Josep Ribes
El trabajo y la exigencia
P: A la hora de plantear un nuevo proyecto, cuales son los primeros pasos que realizas en el proceso creativo. ¿Dónde encuentras la inspiración?
R: Soy muy funcionalista así que para mí es muy importante en primer lugar escuchar las necesidades de mis clientes para poder entrar en acción con la nueva distribución. Esta puede resultar muy beneficiosa y mediante pequeños cambios es capaz de mejorar muchísimo la convivencia en el espacio.
También es muy importante observar el lenguaje del lugar para generar esas futuras mejoras preservando su esencia. Y obviamente estar al día de las tendencias es algo bastante innato dentro de la profesión pues siempre estamos con el “radar” activado. Es una profesión en la que nunca se desconecta, en el mejor de los sentidos, porque cualquier detalle de tu alrededor puede estimularte. Es fundamental tener buenos referentes, seguir a arquitectos, interioristas…
P: ¿Si tuvieras que elegir, prefieres un cliente con la mente abierta o uno con las ideas muy claras?
R: Es una cuestión muy interesante. Te diría que un cliente con la mente abierta porque siempre estará más receptivo a la hora de explorar mejor el espacio y atreverse con detalles que se salgan de lo convencional, pero siempre con sentido común, claro.
P: Actualmente los centros de las ciudades están sufriendo una gran transformación y vemos como la tendencia a hacer grandes reformas está a la orden del día. La magia de una reforma está en manos de los profesionales, pero está claro que no todos los espacios son lo versátiles ni ofrecen todas las posibilidades que a los clientes les gustaría. ¿Cuál es el consejo o pauta que darías a quien quiera comprar una vivienda para reformar completamente?
Proyecto de Magali Bastidas en colaboración con Josep Ribes
R: Un buen punto de partida consiste en observar cómo convive la luz natural con el espacio.
Después, observar bien las zonas húmedas de la casa, es decir, ver cómo de fácil o difícil es generar algún cambio. Por ejemplo, si es el bajo de un edificio siempre será más fácil de rectificar dichas instalaciones al no tener vecinos abajo.
En tercer lugar, es recomendable fijarse en el grosor de los tabiques. Si son de 7 o 10 centímetros de espesor quiere decir que no son paredes estructurales, por lo que se podrán remover fácilmente.
Por último, por supuesto, será importante poder contar con la visión de un o una interiorista. No importa lo pequeño o complejo que parezca el espacio, porque los retos nos estimulan. Y no menos importante, tener a un profesional de la construcción que avale la intervención.
La importancia de los detalles
P: Hablemos un poco de iluminación, muchas veces menospreciada o relegada a un segundo plano, no es vuestro caso. Sabemos la importancia que tiene la iluminación en tus proyectos, ¿Cuál crees que es la clave de una buena iluminación?
¿Realmente una iluminación incorrecta puede hacer de menos un buen trabajo a nivel arquitectónico y de interiorismo?
R: La iluminación es casi tan importante como una buena distribución. No todo vale, hemos de tener en cuenta que estamos planificando un traje a medida y que podemos controlar qué detalles queremos destacar.
Siempre bajo la funcionalidad podremos dotar al espacio de la iluminación apropiada. Para mí, las lámparas son como piezas de arte o como el complemento que te hace destacar un look básico. Es decir, hay ciertas piezas que nos dan la personalidad del espacio así que es muy importante equilibrar la importancia de cada luminaria y generar una buena jerarquía.
También conseguimos hacer que un espacio sea especial mediante iluminación indirecta pero, por supuesto, siempre siendo cautos y no abusando de ella. Si no, parecerá un avión a punto de despegar.
Proyecto de Magali Bastidas en colaboración con Josep Ribes
P: ¿Es difícil encontrar el equilibrio entre la idea de una casa de revista y la de un hogar funcional y de diseño?
R: Me reitero, primero un hogar tiene que ser funcional y luego ya se convertirá en una casa de revista. La clave está en el equilibrio, en generar un buen envolvente que pueda convivir bien con el paso del tiempo y adaptarse a las tendencias con los complementos que son de fácil sustitución, como los textiles o elementos decorativos.
Además, siempre aconsejo a mis clientes que no corran, que es mejor ir saboreando la casa y llenándola de vivencias poco a poco, con recuerdos que surgen de infinidad de experiencias, viajes, arte… La casa necesita su tiempo.
Proyecto de Magali Bastidas en colaboración con Josep Ribes
Las tendencias
P: ¿Cual creéis que va a ser la tendencia estrella en 2023? ¿Será el marrón el nuevo blanco? ¿eres de las que creen que nos volveremos locos por los tonos de alto brillo y vibrantes?
R: Creo que en estos tiempos impera una tendencia que apuesta por lo natural, la sostenibilidad y lo artesanal.
P: ¿Hay algún arquitecto o diseñador que tengas como referencia?
R: La verdad es que admiro a muchos. Últimamente me gusta mucho la arquitectura minimalista de Iker Ochotorena, del estudio OOAA; ver sus espacios tan bien organizados me fascina.
También admiro el trabajo del arquitecto francés Joseph Dirand. Como podréis ver, no tiene nada que ver con Iker, pero el toque vintage es algo que me atrae. De hecho, aunque a nivel de distribución soy bastante purista me gustan mucho los elementos decorativos con reminiscencias del pasado. Creo que le dan un carácter al espacio que me atrae especialmente.
P: ¿Cuál es el proyecto soñado para Magali Bastidas?
R: Es una pregunta difícil. Diría que cualquier espacio residencial, pues disfruto tanto de mi trabajo que me conformo con seguir trabajando y creciendo profesionalmente.
Pero, dispuesta a soñar, me encantaría reformar una masía antigua y actualizarla preservando su carácter original.
Proyecto de Magali Bastidas en colaboración con Josep Ribes
P: Cuéntanos un truco decorativo que nunca te falla.
R: Una buena lámpara, un buen jarrón, un buen cuadro… De hecho, hace un tiempo empecé a explorar una nueva faceta pintando mis propios lienzos. Todo empezó por casualidad. Lo hacía para mí misma en mi tiempo libre y alguno lo compartía en redes sociales. Al verlos, los clientes a los que les estaba llevando su proyecto de interiorismo me empezaron a solicitar lienzos para sus viviendas. Así pues, los realizaba a medida, según lo que me pedía su espacio tanto a nivel de dimensiones como de texturas, colorimetría, detalles, impacto visual… Es algo que me aporta muchísimo porque me permite expresarme de otro modo y, al mismo tiempo, dotar a un espacio de una pieza de arte única a medida y, con ella, poner “la guinda del pastel” a cada proyecto.
Por otro lado, un truco que aconsejo muchísimo y que es fácil de aplicar es pintar las puertas de la casa del mismo color que las paredes para obtener menor ruido visual.
Y la ropa de la cama siempre en tonalidades blancas pudiendo cambiar las fundas de almohadas según la estación, el estado de ánimo, la tendencia, etc.
Así, con pocos gestos consigues que los espacios se transformen.
P: Ese mueble o pieza de diseño que mejor te representa.
R: Después de tantos años en la profesión podría mencionar muchas piezas… Pero una a la que tengo especial cariño y que me acompaña en casa es el sillón BKF de Bonet. Es un clásico que no envejece nunca y aporta mucho carácter al espacio. Su forma ergonómica lo convierte en una pieza ligera que puede ocupar con gracia y personalidad un rincón en tu hogar.
P: ¿Tus 3 artículos favoritos de Singular Market?
R: ¿Solo tres? ¡Qué difícil!
Como ya he contado soy una amante del vintage, y una pieza que desde hace tiempo me tiene robado el corazón es la Silla Chandigarh, una réplica de Pierre Jeanneret.
También la Lámpara de techo negra Dorotea. Me gusta mucho porque es muy versátil y puedes jugar con su forma.
Y otra pieza que me parece exquisita es la Butaca CH25 Wegner. Es uno de esos clásicos del diseño que conviven bien con el paso del tiempo y que aportan mucha fuerza al espacio.
Nos despedimos, ella tiene mucho trabajo y yo, tengo que exprimir Barcelona antes de regresar a León. Seguiremos de cerca sus próximos proyectos, estoy segura de que como siempre, sorprenderá.
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